Lección #39: La maldición de los “breaks”

Ese día en el que él se te plantó al frente y con voz ceremoniosa dijo:

“Creo que deberíamos darnos un tiempo”

Pasado el mini heart atack, empezaste a considerar que no era una mala idea, de hecho habían problemas en la relación y tal vez un tiempo apartados en que los dos pudieran extrañarse, acordarse todas las cosas que amaban el uno del otro, era exactamente lo que necesitaban. Preguntaste cuánto tiempo tipo como para ponerlo en la agenda de tu blackberry y recibiste un “el que sea necesario”. Ya, ok, un poco ambigua su medición pero qué chucha, nunca fue muy bueno con los números. Se separaron con beso en el cachete, abrazo prolongado y mientras te alejabas le pusiste un “Must have been looooove, but it’s over noooooooow ♪” en tu cabeza sólo para redondear la escena. De repente te das con que esto de los “tiempos” es realmente parecido a quedarse en línea en un call center ya que se presentan las siguientes etapas:

ETAPA 1: Por favor no corte, un asesor de servicios lo atenderá enseguida.

Ay la deliciosa felicidad que da la negación. Ese momento maravilloso en que cargada del más absurdo optimismo sientes que no tardarán en comunicarse contigo y darte una solución. Tu relación está ahí, dado que no han terminado, solo están separaditos, tú sigues manteniendo tu papel de enamorada pero a la distancia. No sales mucho, no le devuelves sus cosas, sigues paseando por tiendas y pensando “ay esa camisa le quedaría linda”, no cambias tu estatus en Facebook, ni borras una sola foto. Tú, en el fondo (y aproximadamente a partir del minuto 3 en que empezó el break) estás lista para volver con él #TuNegaciónEsSuProgreso. Es decir, tu relación está vegetal pero te rehúsas a desconectarla.

ETAPA 2: Nuestras líneas están ocupadas

Y de repente te da la sensación de que los operadores están viendo la clausura de las olimpiadas, porque esta espera parece no acabarse nunca. Aparentemente él está ocupadísimo, pensando #SURE en todas las importantes cosas que te dijo que tenía que pensar y dado que solito no ha  podido llegar a ninguna conclusión, ha convocado a un focus group femenino de ex enamoradas, ex agarres, flaquitas de las que siempre le advertiste #AmorEsMiAmigaaaaaa, para que lo ayuden en este momento de reflexión #5ToppingBaladasDeOroPeoplesChoiceAwardDepresionesDeRonaldoPENDEJOPLEASE. Así es, a ti y a él les enseñaron distinto conceptos de cómo se mide el tiempo, para ti se mide en horas, días, semanas, meses y para él en cantidad de flacas que tiene ganas de atracarse para sentirte de nuevo un galán #NoRimaConPatánPorLasPurasHuevas.

ETAPA 3: Tururú Tururú ♪

En este punto te debates entre mandar todo al diablo o seguir en línea, dado que si ya esperaste todo este tiempo, como que colgar suena un poco radical…NO TE PREOCUPES! Él se va a encargar de esto, porque cuando menos lo esperes se cortará la conexión, sin más, sin previo aviso ni disculpas y tú que creías que tu llamada era importante para ellos como te insistió la cabrona de la operadora. Otra opción, claro, es que recibas una respuesta y sea algo así como “Gracias por su espera pero su solicitud no procede” o en este caso un letal “Me gustaría que fuéramos amigos”… y a mí me gustaría tener 4 kilos menos, 2 closets más de ropa, a Ryan Gosling en la cama e inventar la pizza que adelgaza pero hay cosas que no van a suceder. Es como si alguien viniera, te robara el cel y te dijera “llámame más tarde” #DafuqDude, porque ¿Cómo se supone que va a funcionar eso? ¿Qué es lo usualmente hacen los amigos? Bueno, pueden hablar todos los días y tú ayudarlo con sus problemas y dilemas, dándole la seguridad y cariños que necesita para que sea un mejor hombre…con la siguiente boluda que venga y elija por encima tuyo #GOODPLAN #EstrategaDeLujo

Lo cierto es que los dilemas en una relación son bastante parecidos a un posible cuadro de apendicitis porque tu novio es como un apéndice, absolutamente innecesario y sólo lo sientes cuando jode el dolor es confuso e intenso, pero no pueden recetarte nada concreto sin primero identificar la raíz del problema. Tal vez la solución sea aplicar antibióticos porque es una infección pasajera o tal vez ya no haya vuelta atrás y lo mejor sea cortar y sacar permanentemente a la causa del malestar. Ahora ningún doctor te dice “pero váyase a su casa nomás, olvídese del tema, distráigase con otra cosa y cuando tenga una buena corazonada de qué es lo que tiene nos llama” verdad?

Así que o enfrentas los problemas o cuelgas el teléfono de una buena vez y te evitas esta sobre exposición innecesaria, este tibio cómodo, pero peligroso. Los “breaks” son cobardes, es querer salir de cacería pero con el pavo #pavasa en el horno esperándolo en casa y tú no estás para quedarte en línea, memorizando una misma tonadita. Así que dale tu propio call center   0-808-DÍCELO-A-ALGUIEN-QUE-LE-IMPORTE y búscate uno que te atienda a lo Food Court: rápido, servicial y siempre dispuesto a ofrecerte más cosas.

 

 

 

 

252 thoughts on “Lección #39: La maldición de los “breaks”

  1. Pingback: Chanel handbags
  2. Pingback: GUCCI BAGS OUTLET
  3. Pingback: GUCCI OUTLET
  4. Pingback: chanel handbags
  5. Pingback: Google
  6. Pingback: video genesis Scam
  7. Pingback: Google
  8. Pingback: man cheong metals
  9. Pingback: tour adventures
  10. Pingback: CMC Villa
  11. Pingback: tubos de luz led
  12. Pingback: Free Hosting
  13. Pingback: oxyelite.pro
  14. Pingback: více
  15. Pingback: klicken
  16. Pingback: klik
  17. Pingback: klicken
  18. Pingback: casino bonus4
  19. Pingback: hierher
  20. Pingback: my

Leave a reply to หนัง Cancel reply