El blog y el drama son como el apellido Fujimori y la corrupción: siempre los vas a encontrar de la mano. Y dado que tú sigues desmayándote cual Florcita ante cualquier suceso en la vida, esta vez le dedicaremos un post entero al tema #MejorActrizDramáticaSiempre.
Si estás pensando que vas a darle a la “x” porque este post no tiene nada que ver contigo que eres más fresh que el otoño… ok, pero primero responde este test:
¿Alguna vez has estado en medio de una pelea leve con tu novio, sobre, no sé, como tú tenías hambre y él se demoró en recogerte y de un momento a otro terminas concluyendo que te ha fallado en la vida y no sabes si puedes volver a confiar en él?
Drama alert.
¿Alguna vez has estado sola un periodo largo de tiempo y has optado por regresar a la misma relación tóxica sabiendo que voluntariamente te estás tomando una buena dosis de rakumin sentimental?
Drama alert
¿Alguna vez has tenido una hermosa, estable y tranquila relación y de repente te han bajado unas ganas locas de agarrarte a alguien más a ver si con eso le pones tiras a los ojos un poco de picante?
DRAMA ALERT.
¿Algunas vez has dicho las siguientes frases: “me voy a morir sola”, “la felicidad no está en mis cartas”, “a mi siempre me sale todo mal”?
SUPER DUPER DRAMA ALERT
Así es hermana, entre tú y María la del barrio sólo hay un nandito y dos costillas menos de separación.
Ahora, ¿tiene que ver con que seas mujer? Sí y no. El drama no te viene instalado por default en el sistema por ser mujer pero sí es cierto que está más normalizado entre nosotras. Lo tomamos a chiste, estamos acostumbradas. Después de todo siempre se nos acusa de ser el género volátil, el que se deja llevar por sus emociones y tiende a sobredimensionar las cosas, ¿verdad?
En todo caso, y sea por lo que sea, ahí está. Ahora, si tú igual sientes que no tienes nada de que preocuparte aquí van todas las maneras en que el drama puede sabotearte:
El drama distorsiona las relaciones
Siempre hablamos de como Disney y las comedias románticas nos han tronado el cerebro dándonos expectativas irreales del amor. Nadie vería la película sobre el chico y la chica que se conocen, salen, se gustan, se mensajean un par de veces, uno se tira un pedo de casualidad, el otro se ríe, tienen un poco de sexo incómodo y dos meses después están juntos. Disney sabe que NO HAY HISTORIA SIN CONFLICTO porque esa es la primera regla de un buen guión y aparentemente también de tu vida amorosa.
Entonces cuando el chico la persigue, cuando ella lo deja todo por él #FelicityParFavar, cuando los dos se mienten, se engañan, se torturan el uno al otro pero al final todo se perdona, todo sirve para unirlos más, tú te dices a ti misma “ok ok, así tiene que ser la cosa”.
No tiene que ser así. No debe ser así. Puede que no todo sea perfecto en una relación – no todo siempre sea “al borde del asiento” emocionante – pero no necesitas al drama. El drama es una droga: al principio tiene un subidón, un rush, un momento de máxima adrenalina pero de ahí vendrá inevitablemente la bajada, la resaca y el arrepentimiento #TuVidaAmorosaEsUnRave.
El drama es sinónimo de aburrimiento
En mis cortos 29 26 años he visto que hay una relación directa (dícese de “a más de esto, más de lo otro” #PorEsoTeLlevasteEstadística) entre drama y aburrimiento. Las personas más dramáticas que conozco son también las que menos cosas interesantes están haciendo por su existencia. Piensa en un niño de 3 años en medio de una reunión de adultos donde, a falta de estímulos y atención, opta por entrar en berrinche. Ahora súmale 20 años a esa niña, ponle un crop de Forever 21 y un moño alto y ahí estás tú, publicando una story en blanco y negro con una canción indie depresiva #LosMillennialsTambiénLloran.
Amiga, lo digo con cariño, consíguete una vida.
¿Quieres adrenalina? ¿Emoción? ¿Suspenso? Lucha por algo no alguien huevona ya pues deja la necedad. Nadie que está tratando de sacar una empresa adelante, chambeando duro, planificando un viaje, armando un proyecto, estudiando algo que le gusta, tiene el tiempo ni las energías para generar dramas.
El drama aleja
Un poco como que te has acostumbrado a ser la dramática del grupo. Alguien tiene que serlo pues no? Y tus amigas normal, tus amigas te quieren como eres.
#NewsFlash: Tus amigas tienen un grupo de chat donde no estás tú.
No importa lo que te quieras decir, a nadie le gusta el drama porque es muy desgastante. Eres como un sol
¿Una estrella brillante que ilumina a los demás?
NO. Un cuerpo con demasiada energía, que hace que todo gire alrededor de él y que si te acercas demasiado, te quemas.
Lo único que atrae el drama, es más drama. Así que si andas preguntándote quién es el culpable de que siempre te toquen hombres tóxicos, llenos de enredos, que de todo se hacen un mundo y siempre te tienen al borde del colapso nervioso…
El drama te quita perspectiva
Lo que te pasa es importante. Tus penas son importantes. Pero, conviene que de vez en cuando saques tu cabeza llena de canciones de Jesse y Joy por la ventana, y veas lo que sucede en el mundo. El mundo está hasta las huevas mija, y aún así, hay gente que se las arregla para seguir bailando, seguir compartiendo buena onda y no ser una fuente de intensidad y sufrimiento novelero. El drama es opcional, el sufrimiento no.
Así que da este paso hacia una vida más ligera porque al final estar sin drama es como tomarse una selfie con modo belleza: tú, pero más linda. A las penas es mejor tratarlas con abrazos, conversaciones sinceras y tiempo, y dejarle así el sufrimiento melodramático a aquellos que realmente lo necesitan: los hombres con gripe.